Información gentileza de INCUCAI
Información gentileza de INCUCAI
Las principales causas de miedos e inseguridades a la hora de considerar la posibilidad de donar los órganos, son generalmente la resultante de la falta de educación e información acerca de esta temática que nos involucra a todos. Es por ello que desde la Fundación Argentina de Trasplante Hepático ofrecemos este material con respuestas a diversos interrogantes en relación al tema.
El INCUCAI. Único organismo oficial que tiene autoridad para solicitar la donación y proceder a ejecutarla . Fiscaliza las actividades de donación y trasplante de órganos en nuestro país.
El cuerpo es tratado con gran respeto y dignidad. Los órganos donados se obtienen con todos los cuidados de una operación quirúrgica de rutina.
La persona puede especificar que órganos quiere donar. En todos los casos se respetarán sus deseos.
El equipo médico que lo trate en vida, no es el mismo que el grupo médico de ablación de órganos. Los profesionales de la salud harán todos los esfuerzos por salvar su vida. Solamente después de agotar todas las posibilidades, y luego de ser declarado fallecido, se considerará la donación.
Según el Episcopado Argentino, la donación es un “acto de solidaridad y fraternidad humanas y una prueba de que el cuerpo muere, pero jamás el amor que lo sostiene.” Esta postura es compartida por la mayoría de las religiones.
La donación de órganos es un acto de amor solidario. Nadie puede percibir compensación económica por ello así como tampoco nadie podrá exigir pago alguno por el órgano trasplantado.
La posición en la lista de espera no tiene en consideración factores como la etnia, edad, ingresos y clase social. Por el contrario, es imprescindible el tipo sanguíneo, la urgencia médica, la ubicación geográfica, el tamaño del órgano y la compatibilidad de los tejidos.
De acuerdo a la legislación argentina, se exige que tres médicos firmen el acta de defunción tras haber certificado dos veces y con un intervalo de seis horas todas las exploraciones necesarias para confirmar el fallecimiento de la persona. Por otra parte, la complejidad, y el gran número de profesionales necesarios en un operativo de trasplante, como así también la necesidad de compatibilidad entre donante y receptor, hacen imposible concebir el tráfico de órganos. El INCUCAI ofrece todas las garantías de transparencia e idoneidad profesional para asegurar que el acto altruista de la donación.